Matthew Shepard [ID]

Matthew Shepard es un chico que mide 1'84 cm de altura, de complexión delgada. Su piel es blanca, algo rosada, con pecas en su cara. Su cabello es pelirrojo y siempre luce alborotado, a pesar de que lo peina, siempre se ve como si no lo hiciese. Sus ojos son verdes, bastante claritos... La ropa que suele llevar Shepard consta de chaleco, pajarita y un buen abrigo encima... Aparte de llevar unos mocasines... Siempre va bien vestido allá donde vaya. Dentro de su trabajo, al tener que manipular varios tipos de elementos, siempre lleva una bata blanca y unas gafas que cubren sus ojos, para no dañarse, ni corroer su ropa. Siempre va acompañado de un maletín, donde lleva sus cosas.

Se trata de un hombre con principios, que no discrimina al resto en función de su raza, patrimonio o creencias. Amable con cualquier tipo de ser... No es hostil a no ser que se vea obligadisimo a ello. Suele llegar a estrechar sus lazos amistosos, dando a grandes amistades muy duraderas. Shepard, es extremadamente curioso, y muy muy reflexivo... Puede llegar a obsesionarse cuando esta intentando buscar ideas lógicas que pueda llevar acabo, soluciones o incluso descifrar acertijos. Muestra una gran inteligencia, y normalmente habla con mucha delicadeza, usando un lenguaje exquisito, variado y que denota realmente a un hombre respetuoso. Entre otros puntos dentro de su personalidad, destaca la manera de sentirse conmocionado ante la crueldad y la desventaja insana... Es moralmente correcto y muy astuto cuando tiene que salirse con la suya.
Desconoce el amor, a nivel de emparejarse, ya que normalmente muestra mucho más interés por animales y piedra mágicas, que por los seres con los que puede comunicarse normalmente (humanos, demonios, ángeles...); por lo que a veces se le describe como un poco ermitaño. No es muy dado a demostrar sus sentimientos más profundos, a pesar de que aflora su simpatía y cercanía con algunos.
Con aquellas personas o seres que se acercan a él de una forma más picaresca, este se muestra mucho más tímido, incluso llegando a ponerse nervioso, rojo e incluso tartamudear. Generalmente, intenta zafarse de la gente, pues para él, a pesar de tener un rico vocabulario, puede ser un poco tedioso tener que comunicarse con el resto.
Matthew es muy suyo... No dejando entrever lo que piensa... Sin embargo tiene un extraño don para situar a las personas, incluso leer su historia...

Gustos:
-Ama los misterios.
-Adora a los animales, incluso descubrir nuevas especies que apuntar para su libro.
-Escuchar música y la lluvia, es algo que le encanta, pues le ayuda a tranquilizarse y a pensar mejor.
-La naturaleza.
-Observar trucos de magia.
-Leer y escribir libros, historias, teorías...

Disgustos:
-La violencia la odia, sin embargo si se siente obligado a utilizarla no dudará.
-Los malos olores.
-Que no le dejen tranquilo, a veces...
-El racismo, es algo que no lleva bien.
-Las enfermedades.
-El sexo obligado.

Habilidades:
Como ser humano, no posee unos poderes... Pero si de unas habilidades que lo ayudan a salir del paso.

-Matt no es especialmente fuerte, pero es lo bastante rápido como para salir de los aprietos. Gracias a su capacidad de deducción, puede prevenir ciertos altercados que los más despistados y menos ágiles de mente quizás no podrían.

-Quizás en una pelea, ya que no destaca por su condición física, no podría hacer mucho... Pero al tener la capacidad de poder prever que hará el enemigo, puede esquivar algunos golpes con facilidad o incluso darlos él mismo, de tal forma que tiene una capacidad optima para defenderse.

-Por su inteligencia resuelve algunos conflictos, puzzles, acertijos de una manera sencilla y rápida... Esto hace a Matthew todo un cerebrito en potencia, aunque eso no quiere decir que las mates se le den bien.

Entre otras de sus cualidades, se le da bien descifrar escritos, hacer algún que otro remedio medicinal, cocinar y escribir.

Debilidades:
-Es especialmente blandito, por lo cual es débil.
-Cuando piensa mucho en como resolver un problema, le dan fuertes dolores de cabeza.
-Es bastante flojo, por lo que sus cualidades físicas son horribles.

La familia Shepard siempre se había dedicado a la medicina animal, y no esperaban menos de su hijo. Desde bien pequeño, Matthew fue obligado a llevar una serie de estudios. Como siempre había destacado de una forma muy peculiar a lo largo de su vida, cada vez se le ponían  más retos, y cada vez mas difíciles. No había mentor que no se diese cuenta de que les superaba en todos los aspectos... Y eso se debía a su gran inteligencia. Matthew aprendió a hablar y asociar mucho antes que un bebe normal, incluso demostró otras serie de capacidades que asombró a los demás. ¿Pero de dónde sacaba tal inteligencia? Era obvio, Matthew era un niño superdotado en una época complicada. Sus padres, quizás por envidia, enseñaron a su hijo de tal forma que no debiese seguir destacando... Por lo que tuvo que reprimirse como podía ante el resto, a pesar de que a veces algo se le escapaba y esto conllevaba algún tipo de disputa.
Se trataba de un cerebrito, y los cerebritos no siempre eran bien recibidos... Finalmente cuando alcanzó los veinte años de edad, recibió la suficiente sabiduría médica de sus anteriores mentores, como para dedicarse tanto a humanos como a animales... Sin embargo, la vocación de Matthew estaba más volcada en animales, por lo que se dedicaba a seguir estudiándolos, en su naturaleza. Gracias a que sus padres siempre habían estado bien de dinero, y tenían un gran terreno, muchos de esos animales acababan en sus tierras, donde los seguía cuidando y estudiando.

Matthew tenía escritos, sobre la fisiología de dichos animales, sobre su entorno... Pero quiso hacer algo más que eso... Por lo que empezó a escribir una especie de bestiario. Dentro de este incluyó a otros seres que no fuesen humanos, a pesar de su forma humanoide... Y desde entonces comenzó a viajar con su fiel amigo, Niffler, semejante a lo que conocemos como Ornitorrinco... Sin embargo poseía algo de marsupial, ya que tenía una bolsita en la zona de su tripa. Niffler estaba obsesionado con las cosas brillantes, por lo que, cogió como costumbre escaparse de las manos de Matthew y robar todo lo que podía... Esto le ocasionaba problemas a Shepard, pero aun así, siempre conseguía salir airoso.
Al poco tiempo, Shepard presentó un primer volumen en una casa que se encargaba de escribir los libros, encuadernarlos y venderlos, dándole una ganancia al autor. Al salir de este sitio, había bastante gente, y Niffler estaba algo nervioso. Matthew se chocó con un hombre del cual se disculpó instantáneamente... Fue entonces cuando sintió a Niffler mucho más tranquilo.
Al llegar a casa, Matthew experimentó en su primera noche, un sueño extraño. En ese sueño su cuerpo ya no era el suyo, era el de otro chico, mucho más joven que él.

Se despertó y fue entonces cuando vio aquella misteriosa piedra encima de su escritorio... Sabía que Niffler la había robado, y sabía que aquello tenía algo que ver con lo que esa noche había ocurrido... Pronto empezó a estudiarla, esperando entender y volver a verse en el otro cuerpo. Tener otro sueño similar y experimentar nuevamente aquello.

-Ama a Niffler por encima de cualquier cosa, a pesar de que este le causa muchos problemas.
-Le encanta pasar tiempo con sus animales y descubrir especies nuevas.
-Detesta cuando ocurre ese fenómeno extraño por el cual acaba dentro del cuerpo de "Aaron Gaves", pero en parte le produce curiosidad.
-No sabe aun quien es el hombre con el que se chocó, pero sabe que Niffler le robo a él la piedra.
-Desconoce sobre el mundo de las piedras, sobretodo mágicas, por lo que para él, esto es un campo nuevo.
-Aun sigue reprimiendo su gran intelecto.
-Siente vergüenza cuando se le acercan demasiado o intentan tener algún tipo de contacto físico... Aun le vergüenza más ver un cuerpo desnudo.

Apariencia:
Human.
Human 2.
Human 3.
Nombre real del personaje: Newton Scamander
Nombre del anime/manga/videojuego, etc: Animales fantásticos y donde encontrarlos.